Para referirnos a los libros de George R. Martin habrá que explicar que se han escrito todos bajo la saga “Canción de fuego y hielo” y que ha sido un éxito de ventas tanto en España como en medio mundo.
Una historia de fantasía, magia, guerra y conspiraciones que se desarrolla en el continente de Poniente y las tierras salvajes del Norte. Martin comenzó a escribir la serie en 1991 y el primer libro fue publicado en en 1996. Originalmente la saga fue planeada como una trilogía, aunque su éxito y posterior adaptación televisiva ha llevado a que ya se hayan publicado cinco libros y se espera que la serie sea una heptalogía. También hay tres novelas cortas que son consideradas precuelas de la serie; y una serie de novelas cortas que recopilan los capítulos dedicados a un personaje determinado, ya publicados en las novelas principales.
Quince años antes de la novela, los Siete Reinos estaban separados por una guerra civil, conocida alternativamente como la Rebelión de Robert o la Guerra del Usurpador. El príncipe Rhaegar Targaryen secuestró a Lyanna Stark, despertando la ira de su familia y de su prometido, Robert Baratheon (el cabecilla de la rebelión contra el Rey). El Rey Loco, Aerys II Targaryen, ejecutó al padre de Lyanna y a Brandon Stark cuando ellos intentaron rescatarla. El segundo hermano de Lyanna, Eddard Stark, se unió a sus amigos de la juventud, Robert Baratheon y Jon Arryn, en la declaración de guerra contra los Targaryen, asegurando la lealtad de la Casa Tully y la Casa Arryn a través de una cadena de matrimonios dinásticos (Lord Eddard con Catelyn Tully, antigua prometida de su hermano Brandon, y Lord Arryn con Lysa Tully). La poderosa Casa Tyrell continuó apoyando al Rey, pero la Casa Lannister y la Casa Martell pusieron respectivas excusas por los insultos contra sus casas hechos por el Rey. La guerra civil llegó a su clímax con la Batalla del Tridente, en la cual el Príncipe Rhaegar fue asesinado por Robert Baratheon. Los Lannister finalmente acordaron apoyar al Rey Aerys, pero luego estos se volvieron brutalmente en su contra, saqueando la capital Desembarco del Rey. Jaime Lannister, de la Guardia Real, asesinó al Rey Aerys y la Casa Lannister juró lealtad a Robert Baratheon. Los Tyrell y el resto de los fieles al Rey Aerys se rindieron y Robert fue declarado Rey de los Siete Reinos. Desafortunadamente, durante la guerra, Lyanna Stark murió, aparentemente de enfermedad; Robert Baratheon, en su lugar, se casó con Cersei Lannister para consolidar la alianza. A pesar de la victoria de Robert, el hijo y la hija más jóvenes del Rey Loco (Viserys y Daenerys Targaryen) fueron llevados a través del mar por criados fieles. Después de la guerra la Casa Martell eligió el camino del aislamiento, desde que la hermana de la princesa de Dorne, Elia Martell (la esposa del príncipe Rhaegar) y sus hijos pequeños fueran asesinados por Gregor la Montaña Clegane durante el asalto a la capital. Seis años después, el rey Robert atajó con determinación la rebelión de Balon Greyjoy de las Islas del Hierro. Los dos hijos mayores de Lord Balon fueron asesinados, mientras que su hijo más joven, Theon Greyjoy, fue entregado a Eddard Stark como un pupilo.
Un cometa del color de la sangre hiende el cielo, cargado de malos augurios. Y hay razones sobradas para pensar así: los Siete Reinos se ven sacudidos por las luchas intestinas entre los nobles por la sucesión al Trono de Hierro. En la otra orilla del mar Angosto, la princesa Daenerys Targaryen conduce a su pueblo de jinetes salvajes a través del desierto. Y en los páramos helados del norte, más allá del Muro, un ejército implacable avanza hacia un territorio asolado por el caos y las guerras fratricidas. George R.R. Martin, con pulso firme y enérgico, nos deleita con un brillante despliegue de personajes, engranando una trama rica, densa y sorprendente. Nos vuelve testigos de luchas fratricidas, intrigas y traiciones palaciegas en una tierra maldita por la guerra, donde fuerzas ocultas se alzan de nuevo y acechan para reinar en las noches del largo invierno que se avecina.
Las huestes de los fugaces reyes de Poniente, descompuestas en hordas, asuelan y esquilman una tierra castigada por la guerra e indefensa ante un invierno que se anuncia inusitadamente crudo. Las alianzas nacen y se desvanecen como volutas de humo bajo el viento helado del Norte. Ajena a las intrigas palaciegas, e ignorante del auténtico peligro en ciernes, la Guardia de la Noche se ve desbordada por los salvajes. Y al otro lado del mundo, Daenerys Targaryen intenta reclutar en las Ciudades Libres un ejército con el que desembarcar en su tierra. Martin hace que lo imposible parezca sencillo. Tormenta de espadas confirma Canción de hielo y fuego como un hito de la fantasía épica. Brutal y poética, conmovedora y cruel, la magia de Martin, como la del mundo de Poniente, necesita apenas una pincelada para cautivar al lector, hacerlo reír y llorar, y conseguir que el asombro ceda paso a la más profunda admiración por la serie.
Las circunstancias han forzado una tregua en la guerra de los Cinco Reyes. Los intrigantes miembros de la Casa Lannister intentan consolidar su hegemonía en Poniente; la flota de las Islas del Hierro se congrega para la elección de un rey que restituya la gloria perdida del Trono de Piedramar, y en Dorne, el único de los Siete Reinos que aún no interviene en el conflicto, todavía se recuerda con dolor y rabia el asesinato de la princesa Elia y los herederos de los Targaryen. Entre tanto, Brienne de Tarth parte en busca de Sansa Stark en cumplimiento de un promesa, y Samwell Tarly regresa de las tierras inhóspitas del Muro con un anciano, una mujer y un niño de pecho.
Daenerys Targaryen intenta mitigar el rastro de sangre y fuego que dejó en las Ciudades Libres al erradicar la esclavitud en Meereen. Mientras, un enano parricida, un príncipe de incógnito, un capitán implacable y un enigmático caballero acuden a la llamada de los dragones desde el otro lado del mar Angosto, ajenos al peligro que se cierne sobre el Norte, y que solo las menguadas huestes de uno delos reyes en discordia y la Guardia de la Noche se aprestan a afrontar. George R.R. Martin sigue añadiendo sutiles e intrincadas tramas a su impresionante retablo de intrigas y pasiones, y sumando admiradores incondicionales. Rebasa las barreras de los géneros como si nunca hubieran existido: Danza de dragones marca su consagración definitiva entre los más grandes creadores de la historia de la literatura, más allá de cualquier distinciónde etiquetas.